Porque algún día, algo tenía que cambiar...
“Con ardiente afán ¡ay! estudié a fondo la filosofía, jurisprudencia, medicina y también, por mi mal, la teología; y heme aquí ahora, pobre loco, tan sabio como antes.”ah, si. Empecé con Fausto.
“Con ardiente afán ¡ay! estudié a fondo la filosofía, jurisprudencia, medicina y también, por mi mal, la teología; y heme aquí ahora, pobre loco, tan sabio como antes.”
ah, si. Empecé con Fausto.